lunes, 20 de junio de 2011

SIGNIFICADO DE LA ADMINISTRACIÓN DE CAPITAL DE TRABAJO

Los pilares en que se basa la administración del capital de trabajo se sustentan en la medida en la que se pueda hacer un buen manejo sobre el nivel de liquidez, ya que mientras más amplio sea el margen entre los activos corrientes que posee la organización y sus pasivos circulantes mayor será la capacidad de cubrir las obligaciones a corto plazo, sin embargo, se presenta un gran inconveniente porque cuando exista un grado diferente de liquidez relacionado con cada recurso y cada obligación, al momento de no poder convertir los activos corrientes más líquidos en dinero, los siguientes activos tendrán que sustituirlos ya que mientras más de estos se tengan mayor será la probabilidad de tomar y convertir cualquiera de ellos para cumplir con los compromisos contraídos.
Para una empresa de rápido crecimiento, esto es muy importante debido a la que la inversión en estos activos puede fácilmente quedar fuera de control. Niveles excesivos de activos circulantes pueden propiciar que la empresa obtenga un rendimiento por debajo del estándar sobre la inversión. Sin embargo las empresas con niveles bajos de activos circulantes pueden incurrir en déficit y dificultades para mantener operaciones estables.
En el caso de las empresas más pequeñas, los pasivos circulantes son la principal fuente de financiamiento externo. Estas empresas simplemente no tienen acceso a los mercados de capital a más largo plazo, con la excepción de hipotecas sobre edificios. Las decisiones del capital de trabajo tienen sobre la naturaleza global de riesgo-rendimiento y el precio de las acciones de la empresa.
La administración de capital de trabajo abarca todos los aspectos del capital, el trabajo requiere una comprensión de las interrelaciones entre los activos circulantes y los pasivos circulantes, y entre el capital de trabajo, el capital y las inversiones a largo plazo. Suele emplearse como medida de riesgo de insolvencia de la empresa, cuando más solvente o líquida sea menos probable será que no pueda cumplir con sus deudas en el momento de vencimiento. Si el nivel de capital de trabajo es bajo indicara que su liquidez es insuficiente por lo tanto dicho capital representa una medida útil del riesgo. Otra definición menciona que es la parte del activo circulante de la empresa financiado con fondos a largo plazo. Una empresa debe mantener un nivel satisfactorio de capital de trabajo. El activo circulante debe ser lo suficientemente grande para cubrir el pasivo a corto plazo, con el fin de consolidar un margen razonable de seguridad.
El objetivo de este tipo de administración es manejar cada uno de los activos y pasivos a corto plazo de la empresa de manera que se alcance un nivel aceptable y constante de capital neto de trabajo.
La administración del capital de trabajo es la administración de los activos circulantes de la empresa y el financiamiento que se necesita para sostener los activos circulantes, es importante ya que los activos circulantes de una empresa típica industrial representan más de la mitad de sus activos totales, en empresas pequeñas, los pasivos circulantes son la principal fuente de financiamiento externo. El capital neto de trabajo es esencial, sobre todo en los negocios de temporada, para proporcionar un apoyo financiero a las cuentas por pagar en un futuro cercano.
Para determinar la forma correcta, o el nivel de activos circulantes óptimo la administración debe considerar la interacción entre rentabilidad y riesgo, al hacer esta evaluación es posible realizar tres supuestos: que la empresa es manufacturera, que el activo circulante es menos rentable que el activo fijo y que los fondos a corto plazo son menos costosos que los de largo plazo. Cuando mayor sea la razón o índice de activo circulante a total, tanto menos rentable será la empresa y por tanto menos riesgosa. O cuando mayor sea la razón de pasivo circulante a activo total, tanto más rentable y más riesgosa será la empresa. Dado que el capital neto de trabajo puede considerarse como parte del activo circulante de una empresa financiado con fondos a corto y largo plazo se asocia directamente a la relación rentabilidad - riesgo y capital neto de trabajo.
Puntos claves para reflexionar sobre una correcta administración del capital de trabajo frente a la maximización de la utilidad y la minimización del riesgo.
Naturaleza de la empresa: Es necesario ubicar la empresa en un contexto de desarrollo social y productivo, ya que el desarrollo de la administración financiera en cada una es de diferente tratamiento.
Capacidad de los activos: Las empresas siempre buscan por naturaleza depender de sus activos fijos en mayor proporción que de los corrientes para generar sus utilidades, ya que los primeros son los que en realidad generan ganancias operativas.
Costos de financiación: Las empresas obtienen recursos por medio de los pasivos corrientes y los fondos de largo plazo, en donde los primeros son más económicos que los segundos.

lunes, 13 de junio de 2011

Riesgo: El Conocimiento del Cliente y su Entorno

En el día a día de cualquier empresa es muy habitual encontrar situaciones en las que los clientes no cumplen sus promesas de pago. Considerando al mismo como quien accede a un producto o servicio por medio de una transacción financiera (dinero) u otro medio de pago. El riesgo de impago se ha convertido en un mal generalmente aceptado y asumido por las empresas.
En la mayoría de las empresas comerciales generalmente se concede al comprador un aplazamiento en el pago, lo que da lugar a la venta a crédito. Esto supone la entrega de bienes o servicios bajo una promesa de cobro en un determinado plazo de tiempo. Si bien es cierto que esta promesa se fundamenta en la confianza que deposita el vendedor sobre el comprador, aun y todo, no es suficiente.
Lo más importante es asociar la idea de riesgo a las operaciones que se realizan y a los clientes que las demandan. Pero hay que cubrirse de ese riesgo pues es una cuestión básica de supervivencia desde el momento en el que aparece la incertidumbre de cobrar en un plazo. Además, no hay que olvidarse del impacto económico que tiene el impago sobre la cuenta de resultados y el riesgo de desestabilización al que se ve sometida cualquier empresa cuando la cantidad aplazada supone un volumen significativo sobre la facturación global.
Por otro lado, es una sencilla forma de garantizar el pago de un determinado producto o servicio sin olvidar los costos en los que ha incurrido la empresa para ofrecerlo (fabricación en algunos casos, comercial, distribución e incluso el costo de oportunidad que aparece por no vendérselo a otro cliente…). El hecho de intentar tener controlado este riesgo permite a la empresa hacer frente a sus propias obligaciones de pago derivadas de su negocio y en las que incurre para ofrecer ese producto o servicio al cliente.
Una duda que puede surgir es si todas las empresas deben cuantificar de alguna manera el riesgo que conceden a sus clientes. En principio, los factores que se deben tener en cuenta para decidir gestionar el riesgo son fundamentalmente dos: la complejidad de la cartera de clientes y los costos asociados a la morosidad, aunque también depende, en cierta medida de las características del sector en el que opere la empresa. Parece necesario creer que una empresa con operaciones muy concentradas en pocos clientes o con volúmenes individuales muy elevados tenga que cuantificar dicho riesgo a través de algún modo.
El procedimiento que debe seguirse para una correcta gestión del riesgo es el siguiente:
1) Tomar la decisión de vender a un cliente.
2) Conceder un límite de crédito a ese cliente.
3) Realizar un seguimiento de la situación que incluya revisiones periódicas del límite concedido.
Aunque parezca increíble, lo más significativo consiste en decidir si se negocia o no a un cliente. Para tomar esa decisión es necesario analizar aspectos económico–financieros de la empresa, como:
- La solvencia, como capacidad de atender los pagos a medio y largo plazo.
- La liquidez.
- El flujo de caja, como medida del potencial para generar recursos a través de la actividad ordinaria.
- El nivel de endeudamiento global.
- Otros conceptos: hábitos de pago, antigüedad en el mercado, trayectoria, etc.
- Conceptos subjetivos, como por ejemplo, el conocimiento de las personas que están detrás de la empresa, la relación entre ambas, etc.

No es sencillo que un cliente nos facilite esta información pero se debe de investigar y también se pueden consultar bases de datos de empresas que se dedican a obtener informes de este tipo.
La concesión de un límite determinado se hará en función del riesgo asociado que tengan sus ventas. Lógicamente, un mayor riesgo implica un menor límite de crédito. Este límite no debe fijarse para un periodo demasiado largo de tiempo porque la situación del cliente puede cambiar. Como mínimo debe revisarse con carácter anual. Por último, es importante comentar cuáles son algunos de los instrumentos que disponen las empresas para realizar la gestión de riesgos:
- Convenios con Compañías aseguradoras que analizan la salud financiera del cliente (actual y futura) y conceden límites de riesgo.
- Regulación de las situaciones de impago entre comprador y vendedor a través de un contrato mercantil, en el que se fijan unas garantías.
- Solicitud de avales al comprador ante determinados volúmenes de venta.
- Instrumentos financieros como el factoring, que ofrecen una garantía ante la insolvencia de los deudores, ya que al ceder los derechos de cobro, la entidad que realiza dichos servicios asume el riesgo de impagos, fraudes, etc.
Si la empresa se limitara a conceder crédito sólo a los clientes más fuertes, tendría pocas pérdidas por cuentas malas y pocos gastos por operar un departamento de Riesgos; pero por otra parte estaría perdiendo ventas y por tanto bajaría el nivel de ocupación, lo que significaría pérdida de utilidades mucho mayores que los costos implícitos en la extensión del crédito necesaria para hacer negocios con agencias más débiles. La determinación de las normas óptimas de crédito implica igualar los costos incrementales asociados con una política activa de crédito con las utilidades incrementales provenientes del aumento de las ventas.
De ahí la necesidad de este análisis, el cual tiene un alto componente cualitativo y la norma económica en sí para la valoración cuantitativa. Este se basa en el estudio de la información de que se disponga del posible nuevo cliente y que se obtiene en lo fundamental de:

1) Registro Mercantil: Todas las empresas están obligadas a especificar en sus documentos los datos identificativos de su inscripción.
Los datos que se pueden encontrar referenciados son:
· Nombre.
· Capital social y estatutos sociales.
· Nombre de los administradores y auditores.
· Cuentas anuales.
· Informe de gestión.
 
2) Registro de la propiedad - Es igualmente un registro público. Su consulta es útil para verificar la situación patrimonial de los bienes activos declarados por un cliente.
Esto es de gran importancia, considerando que a través del mismo se puede valorar con los medios que cuenta la entidad para saldar sus deudas en caso de quiebra.
De él se pueden obtener los siguientes datos:
· Ubicación del (los) bien (es).
· Descripción e identificación: extensión, superficie, delimitación.
· Circunstancias de la adquisición: compra, herencia, valor de adquisición, fecha de la adquisición.
· Nombre del propietario y circunstancias de la propiedad: compartida con otros titulares, restricciones en la disposición del mismo, existencia de usufructos ó servidumbres, etc.
· Existencias de cargas hipotecarias.

3) Informe bancario - El cliente debe aportar el nombre de las entidades de crédito con las que suele operar. Se pueden obtener informes de las entidades bancarias, sobre todo en el sentido de si aceptarían ó no papel comercial girado al informado sin ponerle condiciones restrictivas.

4) Se puede ubicar información adicional en publicaciones de información comercial se que publican periódicamente:
1. Nuevas empresas que se establecen con expresión del capital social.
2. Demandas judiciales con expresión del demandante, demandado y el importe objeto de la demanda.
3. Relación de empresas que han presentado suspensión de pagos.
4. Relación de efectos impagados, con mención del nombre del librado, domicilio del librado, nombre del librador, importe del efecto impagado.

A partir de la información obtenida de cualquiera y/ó de todas a la vez, así como de cualquier otra fuente de la que se puedan obtener criterios sobre el cliente potencial, se elabora la valoración del mismo, tomando como base una serie de factores que distintos autores clasifican en cuatro ó cinco, pero que en este análisis mantendremos el enfoque tradicional de los cuatro factores, que los profesionales de este campo denominan como las cuatro “Ce” del crédito: Carácter, Capacidad, Capital, Colateral.
* Carácter: se refiere a la honestidad, la integridad, el espíritu de equidad y otras cualidades humanas, que llevan a un cliente a desear ó intentar pagar una compra en la fecha del vencimiento estipulada.
Aunque puede obtenerse una evaluación de esta característica por medio de entrevistas personales ó a través de los datos contenidos en la solicitud, la prueba más evidente la da el historial previo de pagos de ese mismo cliente.
* Capacidad: denota la facultad ó aptitud para hacer frente al pago en la fecha convenida. Los datos acerca de la misma provienen fundamentalmente de la información financiera del cliente potencial, y en particular de sus ingresos y gastos periódicos.
En otras palabras, la capacidad está vinculada a la cuenta de resultados. También tiene que ver con la capacidad el modo en que la nueva obligación contraída por el cliente con la compra actual, va a ser tratada en el conjunto de obligaciones financieras ya existentes de antemano, y otras compras a crédito hechas por el cliente durante igual período. Los estados financieros proporcionados por el mismo, ó por empresas de información financiera son fuente primaria de información al respecto.
* Capital: tiene también que ver con los recursos financieros del cliente, pero se refiere en particular a su soporte financiero, para el caso de que la capacidad resulte inadecuada.
Se mide por el valor de su activo, ó más precisamente por los fondos propios. En otras palabras, está en estrecha relación con el balance. Aquí es preciso hacer una importante distinción entre crédito a consumidores y crédito a empresas, puesto que los primeros en la mayor parte de los casos tienen un escaso patrimonio con el que la empresa pueda resarcirse de una factura impagada.
* Colateral: se refiere a la garantía que respalda la negociación, es generalmente de carácter prendario o económico aunque bien puede ser quirografaria, en base a ella es que se toma la decisión sobre la concesión de crédito.
Desde este punto de vista, podemos clasificar las garantías en los siguien­tes grupos principales:
a) garantías personales;
b) documentos de terceros;
c) prendas, con las siguientes variantes:
-) prendas sobre títulos o acciones fácilmente realizables;
-) sobre acciones de sociedades que no se cotizan;
-) sobre bienes de cambio;
-) sobre bienes de uso;
d) hipotecas.

Una vez definida el potencial de cliente y su entorno se pasa a la Valoración Cuantitativa del crédito a otorgar: Una vez concluido el análisis cualitativo, y siempre que se disponga de la información necesaria para calcular el crédito, se debe proceder a determinar si es eficiente económicamente hablando el establecimiento de relaciones con el cliente potencial.
La evaluación del riesgo debe hacerse en términos de frecuencia y severidad, y en base a una valoración de todos los recursos e ingresos del banco, con sofisticados modelos de simulación de pronósticos, que contemplen desde la pérdida máxima posible, que es la pérdida total más grande que se pueda sufrir, hasta la pérdida máxima probable que sería la peor pérdida, bajo condiciones promedio; y ello sólo puede lograrse mediante la implementación de mecanismos de identificación, evaluación y control, y con procedimientos que funcionen con eficacia.
Aún cuando una institución disponga de un completo sistema de identificación de riesgos potenciales y pueda reducir o minimizar pérdidas, siempre irán apareciendo nuevas situaciones de riesgo que deben ser previstas en base a la Ley de los Grandes Números. La administración de un programa de gerencia de riesgos requiere una dirección, con un funcionario a tiempo completo, coordinador de un excelente equipo, para la identificación, evaluación y control de situaciones potenciales de riesgo, y así poder disponer de los fondos que hagan falta para atender la situación concreta: El éxito del programa dependerá de la calidad de los recursos humanos destinados al efecto.
Por último la eficacia del trabajo del Departamento de Riesgos puede medirse a través de los siguientes indicadores:
-                  Promedio de días de cobro.
-                  Composición de la deuda por edades.
Ratio de costos de Gestión de cobros = Gastos de gestión / Cobros del período.

lunes, 6 de junio de 2011

LA IMPORTAN$$$IA DEL INMIGRANTE

Ya hace un tiempo pensé en tocar el tema de la inmigración que labora en el país del norte, en tratar el impacto de aquellos que hacen el trabajo que los nativos no quieren hacer y por supuesto pagan para ello.
Hoy se realizo el partido México - El Salvador en el marco de la copa de oro, y en un canal de deportes norteamericano se le pregunto a uno de los asistentes al evento cuanto había gastado en el estadio: “300 dólares”, respondió. La respuesta me impresiono pues está claro que esa cantidad en donde está y en su país es mucho dinero.
Pensando en el tema, recordé una noticia que tiene pocos dias y aquí se la presento pues explica en resumen la información que manejaba para abordar el tema.

Deportación puede generar un "desastre económico"

Una deportación masiva de indocumentados reduciría los ingresos tributarios del estado en un 8,5 % y los de Los Ángeles en un 11,6%, según un informe del Centro para el Progreso Estadounidense
Deportar a todos los trabajadores indocumentados de California restaría más de 300.000 millones de dólares a la economía de este estado, el más poblado de EE.UU., y eliminaría más de 3,6 millones de puestos de trabajo (un descenso del 17,4 %), según un estudio presentado hoy.
Además, una deportación masiva de indocumentados reduciría los ingresos tributarios del estado en un 8,5 % y los de Los Ángeles en un 11,6%, asegura el informe del Centro para el Progreso Estadounidense y el Centro de Políticas de Inmigración (CAP-IPC).
El no enfrentar la inmigración "con políticas positivas" puede crear "un desastre económico" en California, advirtió Raúl Hinojosa-Ojeda, director del Centro Norteamericano de Integración y Desarrollo de la Universidad de California Los Ángeles (UCLA) y coautor del informe, en una rueda de prensa.
Según explicó Hinojosa-Ojeda, el informe compara los resultados de la aprobación de una ley de legalización durante la presidencia de Ronald Reagan, 25 años atrás, y los proyectan a la actualidad de California, donde residen unos 10 millones de inmigrantes, de los cuales cerca de tres millones no tienen permisos.
El investigador destacó que los trabajadores indocumentados constituyen cerca del 9 % del total del estado y el 12 % de la fuerza laboral de Los Ángeles.
"Cuando se saca de la economía a los trabajadores indocumentados, también desaparecen los empleos que ellos apoyan con su trabajo, su consumo y sus pagos de impuestos", asegura el reporte.
Sacar masivamente a los indocumentados del estado "elimina 3,6 millones de empleos", tanto para inmigrantes como para trabajadores nativos, agrega.
El alcalde de Los Ángeles, Antonio Villaraigosa, dijo vía telefónica en la misma rueda de prensa que "sacar a la gente de la sombra a la luz beneficia a la economía de California y de Los Ángeles".
El alcalde anotó que la legalización "incrementaría en 1.900 millones (de dólares) los ingresos tributarios de Los Ángeles", lo que significaría un aporte para contrarrestar el déficit fiscal del condado que es de 467.000 millones.
"El estudio agrega sustancia y documentación al argumento que ya conocemos: una reforma de inmigración amplia nos beneficia a todos", aseguró Villaraigosa.

EFE. 27/04/2011 06:43:56 p.m.

Es una lástima que toda esa “preocupación” por parte de las autoridades no incluya la parte humana… bueno, no se le pueden pedir peras al olmo.